"Niños brillantes para un futuro Nepal...??"
3º Viaje a Nepal...
domingo 22 de marzo de 2009
¿Por qué todo esto?
Child Bright Future Nepal. Este es el nombre del orfanato y estas cuatro palabras (Niño Brillante Futuro Nepal) son toda una declaración de intenciones.
Desde que llegamos a casa con Nayana, no podía dejar de hacerme la misma pregunta una y otra vez: ¿Cómo se las arreglarán en el orfanato? y cuanto "peor" estabamos nosotros por la dichosa crísis, más me lo preguntaba. En diciembre le pregunté a Amaia: ¿Nos vamos a Kathmandu?
Nuestro objetivo era por una parte, llevar una ayuda que ya en su día hablamos Amaia y yo que sería para el orfanato (los 2.500 € que el gobierno nos dió por la adopción), y sobre todo estar con Lokendra para averiguar de qué forma podíamos ayudar. Antes de confirmar las fechas cruzamos varios emails con Lokendra, para saber si podíamos ir al orfanato, qué necesitaba...
En la semana que estuvimos en Kathmandu, conocimos cómo se las arreglaban hasta ahora (no ha sido fácil) y también pensé en la probabilidad que tenía el Child Bright de cerrar como ya habían cerrado otros orfanatos. Niños que conocemos, corrían un riesgo muy alto de ir a la calle y sus opciones de futuro no serían precísamente brillantes. Se te encoge el alma, cuando un niño "del pegamento" de unos 6 años se te planta para pedir, y en ese momento piensas lo que no deberías pensar nunca de un niño "es irrecuperable, su vida ya está... y no tiene solución". ¿Ese es el futuro que les espera a los niños que han convivido con nuestra hija? Ya sé que es un futuro extremo, pero es más real ese futuro para un niño de la calle que no otro que queramos imaginar en occidente.
El Child Bright está preparado para acoger a 50 niños, ahora hay 35 de los cuales 20 van al colegio (edades entre 4 y 12 años). También apoyan a otros 5 niños desamparados que se encuentran fuera del orfanato. El otro orfanato que dirige Lokendra, el Bharosa Nepal está aún en funcionamiento, y dice que la gestión es independiente entre los dos.
Lokendra ha insistido en no pedir ayuda porque no quiere correr el riesgo de perder el contacto con ninguna de las familias adoptantes. Dice que si hay alguna ayuda tiene que salir desde dentro. Dice que para hacer funcionar el orfanato, el presupuesto es muy alto y que no pueden compartir sus dificultades con otros (yo añado que son unos 3.500 € de dificultades al mes ó 3.500 cafés que diría Lokendra).
Finalmente en su último email del viernes, (supongo que aconsejado por sus buenos amigos B.B. y Ramesh), Lokendra propone que si una familia contribuye con 1 € al día (un café) sería mucha ayuda para los niños; se trata de que una familia pueda aportar 30 € al mes.
Dice que si finalmente no es posible la ayuda, no tendrá otra alternativa que cerrar el orfanato. Mis percepciones se confirman, (el riesgo de que los niños vayan a la calle), aunque me alivia pensar que con la ayuda que hemos llevado pueden mantenerse en pié un poco más, pero el riesgo continúa.
Gabriel Cid
Esta carta la escriben unos padres adoptantes, que yo me he permitido reproducir.